Las membresías son una gran herramienta para elevar el nivel de tu empresa. Con este modelo de negocio puedes fidelizar aún más a tus buenos clientes y atraer la atención de muchas más personas.
Pero antes de lanzarte con un programa de este tipo en tu salón de belleza o spa, debes considerar lo siguiente:
1. Diferencias entre un programa membresía salón y uno de lealtad
La membresía establece el pago de un monto fijo mensual para el suscriptor a cambio de un pack de servicios. Por otro lado, el programa de lealtad ofrece descuentos y beneficios a los clientes frecuentes. En otras palabras, es una forma de entusiasmar a las personas cumplir las metas fijadas para recibir recompensas, pero no representa ninguna garantía de que regresen.
2. Formas de determinar el costo fijo mensual
El valor de una membresía mensual variará dependiendo de lo que incluya. De esta manera:
- Un monto alto puede incluir servicios ilimitados.
- Un monto intermedio es ideal para los clientes que requieren algunos servicios determinados (y limitados) al mes.
- Un monto pequeño sirve como abono para cualquier servicio que quiera el cliente o como pase para acceder a precios preferenciales y descuentos.
3. Debes establecer una duración apropiada
La duración ideal de un programa membresía salón dependerá de la frecuencia con que tus clientes asistan a tu salón o spa. Por ejemplo, nadie se realiza un peeling químico todos los meses, pero sí una manicure o un tinte de cabello. De esta manera, puedes ofrecer planes trimestrales, semestrales o anuales para cada tipo de persona.
4. Es una gran oportunidad para mostrar tratamientos poco solicitados
Si dentro de tu oferta incluyes servicios de gran calidad, pero que la gente no utiliza, puedes incluirlos en las membresías. Así, tus clientes podrán aventurarse a probarlos, a un precio más acotado, incrementando también tus ingresos.
5. Restricciones
Una membresía no es un free pass a todos los productos y servicios. Debes poner ciertos límites para sacarle el máximo provecho al programa, y considerar que siempre exista transparencia con lo ofrecido y lo que recibirán tus clientes. Así, podrías evaluar las restricciones de acuerdo a:
- Días y horarios para agendar servicios: idealmente debes restringir las citas a tus horarios menos solicitados para no colapsar el salón ni perder clientes que paguen el precio completo.
- Servicios básicos y premium: para generar mayor oferta, crea distintos tipos de membresía, desde las más básicas a las más completas. Así, también asegurarás ingresos mayores y menores.
- Protocolo de salida: una vez que se firma el contrato, el cliente se ve comprometido a pagar las mensualidades hasta que termina el programa. Sin embargo, puedes establecer un protocolo de salida para quienes no puedan seguir asistiendo a tu salón o no quedaron satisfechos con tus servicios y quieran darle fin a su membresía, pagando la mitad de las mensualidades pendientes u otro monto que consideres apropiado y justo.
- Transferencia de los servicios: debes determinar si solo la persona que paga la membresía puede utilizarla o si pueden acceder a ella otras personas bajo el mismo título, por ejemplo, una mamá que quiere regalarle los servicios del mes de febrero a su hija.
6. Todo va por escrito
Cada cliente debe firmar un contrato para adherirse a una membresía, de lo contrario, el cobro mensual no está garantizado. Además, debes incluir los términos, condiciones y restricciones para protegerte ante acusaciones legales.
7. Difusión
Cuando el programa membresía salón esté listo para empezar a funcionar, debes procurar que llegue a la mayor cantidad posible de personas. Puedes valerte del email marketing para enviar correos a tus clientes frecuentes, además de ofrecer a la clientela nueva a opción de ser parte de este exclusivo círculo de beneficios.
Atrévete a probar el sistema de membresía y verás cuán fácil es de implementar, tendrás más clientes, aumentarás tus ganancias y destacarás entre tu competencia.
También podría interesarte: