La ciencia médica se basa en un conjunto de pruebas que apuntan al cuidado, atención y recuperación del cuerpo humano. En este sentido, parte del éxito de cualquier centro médico depende del excelente análisis clínico ejemplo del buen servicio que tienes que prestar a tus pacientes para ser una de sus mejores alternativas.
Dicho esto, en este artículo veremos qué es un análisis clínico, para qué sirven los mismos y los tipos de análisis clínicos que puedes ofrecer en tu centro médico.
Qué es un análisis clínico
Para responder qué son los análisis clínicos, podemos decir que son un tipo de prueba de laboratorio específica que consiste en el estudio de muestras biológicas que se toman del cuerpo humano, tales como la sangre, la orina y las heces.
Esta prueba explora la muestra a través de procesos de laboratorio específicos con el propósito de detectar indicios de anomalías o problemas y sirven para determinar la conveniencia de un tratamiento específico o de un proceso terapéutico particular.
Para qué sirven los análisis clínicos
La función principal de los análisis clínicos es permitir al médico tratante determinar y reconocer trastornos de salud a través del rastreo de alteraciones en los valores normales del cuerpo, con respecto a la referencia estándar de un cuerpo humano sano.
Este tipo de análisis y lectura de valores es muy útil a la hora de rastrear enfermedades crónicas de accionar silente (es decir, que no generan síntomas aparentes en los pacientes) como lo son, por ejemplo, la hipertensión o la diabetes.
A grandes rasgos, los objetivos específicos del análisis clínico son: prevenir enfermedades y confirmar o descartar anomalías en el paciente.
La prevención de enfermedades se realiza con la temprana detección de valores fuera del parámetro normal, a través de estudios clínicos periódicos que perfilan la salud de tu paciente. Este tipo de estudio preventivo es regular, y permite confirmar que todos los valores de tu paciente se encuentren entre el rango normal. En caso de no estarlo, permite adoptar las medidas correctivas correspondientes.
Esta función de prevención de los análisis clínicos suele enfocarse en el control consecutivo de valores (como la glucosa, el colesterol, el ácido úrico) cuyas alteraciones ameriten la toma de acciones preventivas que permitan evitar el desarrollo de patologías complejas y peligrosas.
Además de la consecuente observación preventiva de los valores, otra función primordial del análisis clínico es confirmar o avalar diagnósticos médicos. En función del tipo de prueba, un buen análisis clínico descarta la presencia de algún tipo de enfermedad para así confirmar o descartar cualquier hipótesis clínica.
De cualquier forma, son de gran utilidad al momento de realizar cualquier tipo de intervención quirúrgica, pues confirma el estado de salud previo del paciente, el cual puede determinar el grado de éxito de la intervención.
Igualmente (y este es un aspecto que generalmente no se divulga) el papel de los análisis clínicos en el campo de la investigación es sumamente importante. En paralelo a la práctica médica habitual de chequeos y diagnósticos, el análisis clínico es una herramienta fundamental en las investigaciones dedicadas al estudio de enfermedades, en la creación de medicamentos o tratamientos, y en el ámbito científico académico.
Tipos de análisis clínicos que existen según la especialidad
El procedimiento ideal de aplicación de los análisis clínicos consta de dos partes importantes. Primero, la realización de los análisis (también conocidos como pruebas de laboratorio) realizados por personal médico especializado en este tipo de procesos: los bioanalistas, auxiliares de laboratorio o incluso, investigadores especializados.
Segundo, el proceso de prescripción e interpretación del análisis para la adopción de los tratamientos de rigor. Esta parte es realizada exclusivamente por el personal médico especialista según el área médica.
La formación del personal especializado en el análisis clínico, como ejemplo de excelencia médica profesional, requiere de un estudio que determina las competencias del analista según áreas científicas específicas como: genética, parasitología, bioquímica, microbiología y citología. Estas a su vez se especializan en áreas mucho más específicas, por ejemplo:
Según la especialidad genética
- ADN.
- ARN.
- Purificación, cuantificación y separación de los ácidos nucleicos.
- Genes y genoma.
- Cromosomas.
- Estudio de los cromosomas.
- Reproducción celular: mitosis y meiosis.
- Replicación y reparación del ADN.
- PCR.
- Tecnología del ADN recombinante.
- Secuenciación.
- Técnicas de hibridación de ácidos nucleicos: Southern-blot, Northern-blot, MLPAs, microarrays.
- Mutaciones y polimorfismos.
- Extracción de muestras de tejido o células para el análisis genético.
- Terapia génica.
- Cáncer.
- Aplicaciones de las técnicas genéticas.
Según la especialidad en parasitología
- Generalidades de parasitología.
- Clasificación de parásitos, diferentes tipos de ciclos de vida.
- Exposición de diferentes técnicas de diagnóstico general.
- Nematodos.
- Hemoparásitos.
- Diferentes huevos de parásitos.
- Parasitosis más comunes.
- Parasitosis emergentes.
- Parásitos de los productos pesqueros.
- Inmunología parasitaria.
- Tratamiento general y profilaxis.
- Endoparásitos.
- Exoparásitos.
- Infecciones por trematodos y cómo se diagnostican.
- Diseño teórico de cómo realizar el diseño de una PCR para diagnóstico parasitario.
- Diseño teórico del método de coproparasitología por flotación y directo.
- Diseño teórico de cómo realizar una prueba serológica con un kit para la detección de parásitos.
Según la especialidad bioquímica
- Tipo de muestras.
- Procesamiento de muestras hematológicas.
- Técnicas bioquímicas.
- Técnicas inmunológicas.
- Técnicas genéticas y de biología molecular.
Según la especialidad microbiología
- Bacteriología.
- Virología.
- Micología.
- Parasitología.
- Gestión/tratamiento de residuos.
Según la especialidad citología
- Ecológicas.
- Recogida de muestras.
A pesar de la amplia gama de análisis que pueden generarse en la disciplina del análisis clínico, los tipos básicos de análisis clínicos de mayor demanda en los procesos médicos son:
- Serología.
- Parasitología.
- Marcadores Virales.
- Preoperatorios.
- Marcadores Tumorales.
- Inmunología y Endocrinología.
- Biometría Hemática.
- Examen General de Orina.
- Smac 30.
- Exámenes Antidoping.
- Pruebas Hormonales.
El análisis clínico ejemplo es una herramienta fundamental en el desarrollo de la medicina moderna, y es de suma importancia que lo ejecute un personal calificado para este tipo de estudio en tu centro de salud. La combinación perfecta de un buen equipo de analistas con un staff médico de calidad ,garantizará a tus pacientes un servicio médico de los mejores.
Por otro lado, ten en cuenta que llevar un control de estos análisis médicos puede ser algo engorroso, por lo que un software de gestión médica como AgendaPro puede ser útil para este fin. ¡No pierdas más tiempo y solicita tu prueba gratis haciendo clic aquí!
Preguntas frecuentes sobre análisis clínico ejemplo
¿Cómo se hace un análisis clínico?
Para hacer un análisis clínico se debe extraer una muestra del cuerpo del paciente (por ejemplo, su sangre) para luego procesarla en el laboratorio clínico.
¿Cuál es el análisis clínico más completo?
Entre los análisis clínicos más integrales, el conocido como perfil 20 es uno de los más completos.
¿Qué se estudia en análisis clínico?
Los análisis médicos estudian los distintos valores que definen lo que podemos llamar la salud del cuerpo humano.
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