Cada vez son más los profesionales que se inclinan por los tratamientos de electroestética. Asimismo, el público busca informarse en esta corriente que, si bien puede parecer novedosa, data desde el Siglo XIX.
La electroestética consiste en un rango de tratamiento de belleza que se basa en corrientes eléctricas que pasan por debajo de la piel con fines terapéuticos. Esta terapia puede enfocarse en la tonificación muscular o incluso el micro-lifting facial.
Si bien puede sonar como un tratamiento invasivo o abrasivo, la sutileza de las ondas eléctricas lo hace sumamente recomendable. Asimismo, es importante señalar que la electroestética está basada en la electroterapia, que cuenta con un enorme respaldo en la industria de la rehabilitación y la comunidad científica.
Tipos de Ondas Electromagnéticas
Cuando hablamos de ondas electromagnéticas, podríamos profundizar en aspectos como los Rayos X, radiofrecuencia o luz visible. Asimismo, para los fines del tratamiento estético, cada una de estas ondas podría tener un beneficio particular en nuestro cuerpo.
La terapia electroestética se vale de energía electromagnética para generar reacciones químicas en los tejidos de nuestra piel. De esta forma, será la misma piel la que actúe en su proceso regenerativo, a diferencia de otros procedimientos mucho más abrasivos o invasivos como la cirugía estética.
Es por eso que el profesional de la estética que se forme en este tipo de terapia, deberá conocer a profundidad el tipo de onda que utilizará en cada tratamiento para así aprovechar al máximo las ventajas de la electroestética.
Asimismo, esto les permitirá conocer con profundidad cada uno de los equipos y maquinarias involucrados en el proceso, así como asesorar a sus clientes en función de sus necesidades específicas.
Beneficios y aplicaciones en tratamientos de estética
Como mencionamos con anterioridad, la electroestética permite generar cambios plausibles y notorios sin necesidad de herir la piel. Por eso, es recomendable para todo tipo de clientes interesados en tratamientos de belleza.
La terapia electroestética permite rejuvenecer la piel gracias a la eliminación de várices y el favorecimiento de la depuración del organismo. Asimismo, se ha demostrado que tiene efectos positivos en la pérdida de peso y reducción de estrías, celulitis, e incluso grasa corporal. Todo esto se traducirá a su vez en el aumento de la masa muscular.
Por otra parte, este tratamiento ha demostrado su efectividad en el retraso del envejecimiento. Esto se debe a que la electroestética favorece la regeneración de las células de la piel, el fortalecimiento de los tejidos, la eliminación de cicatrices y el moldeo de las extremidades.
Tipos de tratamientos electroestéticos
- Radiofrecuencia: La radiofrecuencia es una de las técnicas por excelencia para estirar y rejuvenecer la piel. El procedimiento consiste en aplicar ondas de energía y calor hacia la dermis para incentivar la producción de colágeno. Es sumamente efectiva para neutralizar el envejecimiento de la piel, las arrugas, y las bolsas en los ojos.
- Cavitación: La cavitación, también conocida como lipólisis ultrasónica, es un tratamiento para moldear el cuerpo mediante la eliminación de grasa debajo de la piel. Este procedimiento es mucho menos invasivo que una liposucción, pues favorece que el cuerpo absorba estas impurezas a través del sistema linfático. Asimismo, no requiere incisiones, lo cual favorece una rápida recuperación.
- Vacumterapia: La vacumterapia es un tratamiento estético que busca movilizar la grasa focalizada hacia el sistema linfático. Así, esta puede ser expulsada a través del sudor y la orina y ayudar a eliminar la celulitis. Tal como las mencionadas previamente, se trata de un tratamiento no invasivo para reducir el tejido adiposo, y puede complementarse también con sesiones de cavitación.
- Presoterapia: También conocida como drenaje linfático, la presoterapia consiste en la aplicación de presión de aire alternada con la compresión y descompresión de varias áreas del cuerpo. Esto estimulará al sistema linfático para eliminar las impurezas y toxinas del cuerpo e incentivar la circulación de la sangre.
¿Cómo puedo formarme en electroestética?
De más está decir que el profesional de la electroestética deberá formarse y conseguir la certificación pertinente. Si bien estos procedimientos no son abrasivos ni perjudiciales, no todos son recomendables para todos los clientes, por lo cual es fundamental la instrucción del profesional antes de su aplicación en cualquier centro estético.
En la actualidad, existen numerosas formaciones de técnicos en electroestética, en la que los interesados aprenderán los protocolos pertinentes de higiene, prevención y realizarán prácticas supervisadas por profesionales de la industria.
No es casual que sean cada vez más los que se animen a realizar estos procedimientos de rejuvenecimiento de piel y moldeo del cuerpo. Por todo lo expuesto con anterioridad, queda claro que la electroestética ha llegado para quedarse.
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