El periodontograma, conocido también como diagrama dental, dentograma u odontograma adulto, además de ser una herramienta para el diagnóstico de piezas dentales, sirve para reconocer todo tipo de trabajos dentales anteriores en pacientes.
En este artículo te explicaremos qué es y cómo se llena un periodontograma u odontograma.
¿Qué es un periodontograma o diagrama dental?
Para referirnos al periodontograma, debemos saber primero qué es el periodonto. Se llama periodonto al conjunto de tejidos que rodean a cada uno de los dientes. Su función es servir de soporte a las piezas dentales en la mandíbula y los huesos maxilares. Los tejidos que conforman el periodonto son la encía, el ligamento periodontal, el hueso alveolar y el cemento.
¿Para qué sirve un periodontograma?
El periodontograma es un procedimiento clínico dental que sirve para diagnosticar el estado del periodonto.
- Consiste en un diagrama donde se registra el estado del periodonto que rodea cada uno de los dientes, a través de un esquema de ambas arcadas dentales (superior e inferior), que refleja las características de cada diente y permite plasmar datos específicos del examen de tu paciente.
- Con el periodontograma se diagnostica el estado de cualquier enfermedad periodontal, como la periodontitis o la gingivitis, por medio de radiografías o sondajes.
El periodontograma es el componente más importante de una historia clínica odontológica. Este gráfico sirve como un mapa, en donde cada una de las piezas está representada e identificada según una nomenclatura universal que le permite a los odontólogos interpretarlo y acceder a su información independientemente de su país o lengua de origen.
Componentes del Sondaje Periodontal
El sondaje periodontal constituye el núcleo del periodontograma, involucrando la evaluación sistemática de diversos parámetros clínicos que revelan el estado de salud de los tejidos periodontales. Durante este procedimiento, el especialista utiliza instrumentos específicos para obtener mediciones precisas que posteriormente se registran en el periodontograma digital.
Profundidad de Sondaje
La profundidad de sondaje representa uno de los valores más importantes registrados en el periodontograma. Este parámetro se mide utilizando una sonda periodontal milimetrada que se introduce suavemente desde el margen gingival hasta el fondo de la bolsa periodontal.
Durante la exploración, se evalúan seis puntos por diente: tres en la cara vestibular (mesio-vestibular, vestibular y disto-vestibular) y tres en la cara lingual o palatina (mesio-lingual, lingual y disto-lingual). Esta metodología sistemática garantiza una evaluación completa de toda la circunferencia dental.
Los valores normales de profundidad de sondaje se sitúan hasta los 3 milímetros, mientras que profundidades superiores a este valor se consideran patológicas e indican la presencia de bolsas periodontales. Profundidades de 4-5 mm sugieren gingivitis o periodontitis inicial, mientras que mediciones de 6 mm o más evidencian periodontitis moderada a severa.
La profundidad de sondaje no solo indica la presencia de enfermedad periodontal, sino que también proporciona información valiosa sobre el grado de progresión de la patología y la respuesta de los tejidos a los tratamientos implementados.
Nivel de Inserción Clínica
El nivel de inserción clínica se calcula mediante la suma del margen gingival más la profundidad de sondaje, proporcionando una medición desde un punto fijo del diente hasta el fondo de la bolsa periodontal. Este punto de referencia habitualmente es la unión amelocementaria, que representa la línea donde se encuentran el esmalte y el cemento radicular.
Este parámetro constituye un indicador crucial de la pérdida de inserción periodontal, reflejando el daño acumulativo causado por la enfermedad periodontal a lo largo del tiempo. A diferencia de la profundidad de sondaje, que puede variar según la posición del margen gingival, el nivel de inserción clínica ofrece una medida más estable y objetiva del estado periodontal.
La pérdida de inserción clínica se considera el signo más definitivo de periodontitis, ya que indica destrucción irreversible de las estructuras de soporte dental. Esta información es fundamental para establecer el diagnóstico diferencial entre gingivitis y periodontitis, así como para determinar el pronóstico individual de cada diente.
El seguimiento del nivel de inserción a lo largo del tiempo permite evaluar la estabilidad de la enfermedad periodontal y la eficacia de los tratamientos, proporcionando datos objetivos sobre la progresión o estabilización de la patología.
Sangrado y Supuración al Sondaje
El registro de sangrado al sondaje constituye un indicador fundamental de inflamación gingival activa y presencia de enfermedad periodontal. Durante el sondaje suave con la sonda periodontal, la aparición de sangrado indica la existencia de un proceso inflamatorio en los tejidos gingivales.
El sangrado al sondaje se registra como un dato binario (presente o ausente) en cada sitio evaluado, permitiendo calcular posteriormente el porcentaje total de sitios con sangrado. Este índice proporciona una visión general del grado de inflamación gingival y constituye un excelente indicador de la respuesta de los tejidos al tratamiento.
La supuración, por su parte, señala la presencia de infección periodontal activa y se caracteriza por la salida de material purulento desde la bolsa periodontal. La presencia de supuración indica un proceso infeccioso más severo y requiere intervención terapéutica inmediata.
Ambos parámetros son reversibles con un tratamiento adecuado, lo que los convierte en excelentes indicadores para monitorizar la respuesta de los tejidos a las terapias periodontales implementadas. La reducción progresiva del sangrado al sondaje indica una mejora en la salud gingival y la eficacia del tratamiento.
Recesión Gingival
La recesión gingival se define como la retracción del tejido gingival desde su posición normal en la unión amelocementaria, exponiendo la superficie radicular del diente. Este parámetro se mide en milímetros y puede presentar valores tanto negativos como positivos.
Los valores negativos indican recesión gingival verdadera, donde el margen gingival se encuentra apical a la unión amelocementaria. Los valores positivos, por el contrario, señalan hipertrofia gingival, donde el tejido cubre parcialmente la corona dental más allá de su posición normal.
La recesión gingival no solo afecta la estética dental, sino que también puede causar sensibilidad radicular debido a la exposición de la superficie de la raíz. Esta condición puede comprometer la retención de placa bacteriana y dificultar los procedimientos de higiene oral del paciente.
El registro preciso de las recesiones gingivales es fundamental para planificar tratamientos reconstructivos como injertos gingivales o técnicas de cobertura radicular, especialmente en casos donde la estética constituye una preocupación principal para el paciente.
Movilidad Dental
La evaluación de la movilidad dental proporciona información valiosa sobre el grado de pérdida de soporte óseo y ligamentoso de cada diente. Esta clasificación se realiza mediante una escala del 0 al 3, donde cada grado representa un nivel específico de desplazamiento dental.
El grado 0 indica ausencia de movilidad, representando una situación normal donde el diente mantiene su estabilidad fisiológica. El grado 1 corresponde a movilidad leve, apenas perceptible al tacto. El grado 2 señala movilidad moderada, claramente detectable pero limitada al plano horizontal. Finalmente, el grado 3 indica movilidad severa, con desplazamiento tanto horizontal como vertical.
La movilidad dental resulta de la pérdida progresiva del soporte óseo alveolar y del ligamento periodontal, estructuras fundamentales para mantener el diente en su posición. Esta información es crucial para establecer el pronóstico individual de cada diente y planificar estrategias terapéuticas apropiadas.
En casos de movilidad severa, puede ser necesario considerar la extracción dental y su posterior reemplazo mediante implantes o prótesis, mientras que grados menores de movilidad pueden beneficiarse de tratamientos periodontales conservadores y técnicas de estabilización.
Evaluación de Furcas
La evaluación de furcas se realiza específicamente en dientes multirradiculares (molares y premolares superiores) utilizando una sonda curva especializada conocida como sonda de Nabers. Esta exploración determina el grado de destrucción ósea en la zona de bifurcación o trifurcación radicular.
La clasificación de las furcas se establece en tres categorías principales: inicial, abierta o completa, según la profundidad de penetración de la sonda en el espacio interradicular. El compromiso de furca inicial indica una pérdida ósea menor a 3 mm, la furca abierta señala una destrucción ósea que permite el paso completo de la sonda pero sin comunicación con el lado opuesto, y la furca completa indica una comunicación total entre las caras vestibular y lingual del diente.
El compromiso de furcas representa un indicador de progresión avanzada de la enfermedad periodontal y constituye un factor pronóstico crítico para la supervivencia a largo plazo del diente afectado. La presencia de furcas comprometidas complica significativamente tanto el tratamiento como el mantenimiento posterior.
Esta información es fundamental para la planificación terapéutica, ya que dientes con compromiso de furca severo pueden requerir tratamientos especializados como cirugías regenerativas, amputaciones radiculares o, en casos extremos, extracción y reemplazo protésico.
¿Qué información incluye un periodontograma?
El odontograma debe realizarse en la primera consulta de cada paciente, pues se trata de la base fundamental de toda historia clínica dental; que aplicada de manera efectiva arroja información tan importante como:
- El estado general de la boca de tu paciente, y el registro de cada proceso con el tiempo.
- Las diferentes piezas dentales que requieran una acción o tratamiento inmediato o a largo plazo.
- El tratamiento específico y la zona en la que debe ser realizado según el caso del paciente.
- Todo tipo de tratamiento anteriores a la consulta y diagnóstico actual.
Igualmente, se puede determinar el estado de salud de las zonas periodontales a través del análisis de un conjunto de aspectos referidos en el periodontograma. Estos aspectos son:
La ausencia de alguno de los dientes: la ausencia de una pieza dental influye en el nivel de desgaste de sus piezas vecinas debido a la pérdida del hueso de soporte en ese espacio bucal.
- La movilidad de las piezas dentales: aunque sea poco perceptible clínicamente, los dientes están en constante movimiento. La movilidad que se aprecie en un periodontograma será siempre una movilidad anormal que altera el equilibrio del periodonto.
- Casos de furca visible: la furca es la zona inferior de los dientes, donde se encuentran las raíces de las muelas. La exposición de esta zona es indicativo de un problema, y puede ocasionar lesiones importantes a las piezas dentales.
- Sangrado: sobre todo después del sondaje, indica la acción negativa de la placa en la encía.
Márgenes gingivales: sirve para determinar si existen lesiones importantes en la encía.
Según el análisis y búsqueda de estas y otras señales del periodonto, en un buen periodontograma podrá indicarse el estado general de una dentadura, qué piezas están en estado más crítico y el tiempo o tipo de tratamiento que necesitan, por lo que facilita hacer un seguimiento constante de cada paciente.
Toda esta información arrojada y compilada por el periodontograma busca, en primer lugar, reconocer mediante el examen el estado del paciente al iniciar el tratamiento. También busca conocer los trabajos anteriores y el estado de cada uno de ellos al momento, para facilitar el intercambio de información y el trabajo entre dentistas de diferentes especialidades de ser esto necesario, de allí su importancia. En consecuencia, el periodontograma deberá ser utilizado con precisión en cada visita del paciente.
Tipos de periodontograma
Según su formato y la forma en la que aparecen representados los dientes, existen dos tipos de odontogramas dentales:
Los odontogramas anatómicos: son aquellos donde se representan las piezas dentales según su forma exacta. También conocidos como odontogramas universales o numéricos, en ellos cada pieza se nombra con un número, aunque existen determinadas variantes donde son identificados con letras mayúsculas y pares numéricos.
Los odontogramas geométricos: donde se representan los dientes a través de círculos y cuadrados, o distintas figuras geométricas que representan las cuatro caras de la pieza dental específica.
Procedimiento del Periodontograma
El procedimiento del periodontograma es un proceso indoloro que se realiza en la consulta dental utilizando instrumental especializado. La duración aproximada oscila entre 20 y 30 minutos, dependiendo del número de dientes presentes y la complejidad del caso clínico específico.
Durante el examen, el periodoncista o dentista utiliza una sonda periodontal calibrada para realizar las mediciones necesarias de forma sistemática. El paciente permanece cómodamente sentado en el sillón dental mientras el profesional examina cada diente de manera individual, registrando los datos obtenidos en tiempo real en el software clínico especializado.
El procedimiento se complementa habitualmente con radiografías periapicales y una radiografía panorámica, que proporcionan información adicional sobre el estado del hueso alveolar y la presencia de patologías no detectables clínicamente. Esta combinación de datos clínicos y radiográficos ofrece una visión integral del estado periodontal del paciente.
Es normal que durante el sondaje se produzca un leve sangrado, especialmente en áreas con inflamación gingival preexistente. Este sangrado es transitorio y no representa ningún riesgo para la salud del paciente. El registro digital inmediato de todos los datos garantiza la precisión de la información y facilita su posterior análisis y seguimiento.
Indicaciones del Periodontograma
El periodontograma está indicado en múltiples situaciones clínicas que requieren una evaluación precisa del estado periodontal. El diagnóstico inicial constituye la indicación más frecuente, especialmente cuando el paciente presenta síntomas como sangrado gingival, inflamación, halitosis o movilidad dental.
La evaluación pre-tratamiento representa otra indicación fundamental, particularmente antes de procedimientos complejos como la colocación de implantes dentales, tratamientos de ortodoncia o rehabilitaciones orales extensas. En estos casos, el periodontograma proporciona información crucial para determinar la viabilidad de los tratamientos propuestos y planificar intervenciones periodontales previas si fuera necesario.
El seguimiento de pacientes con periodontitis tratada requiere la realización de periodontogramas de control cada 3 a 6 meses, dependiendo de la severidad inicial de la enfermedad y la respuesta al tratamiento. Este monitoreo permite detectar precozmente cualquier signo de recidiva y ajustar las estrategias terapéuticas según sea necesario.
En pacientes con factores de riesgo periodontal aumentado, como diabéticos, fumadores o aquellos con antecedentes familiares de enfermedad periodontal, se recomienda un control anual mediante periodontograma. Esta frecuencia permite identificar cambios sutiles en el estado periodontal antes de que se desarrollen síntomas evidentes.
La monitorización de la eficacia de tratamientos periodontales específicos también constituye una indicación importante, permitiendo evaluar objetivamente la respuesta de los tejidos a las intervenciones realizadas y modificar los protocolos terapéuticos según los resultados obtenidos.
Interpretación de Resultados
La interpretación de los resultados del periodontograma requiere un análisis conjunto de todos los parámetros clínicos registrados durante el examen. El especialista evalúa la información obtenida considerando factores como la edad del paciente, factores de riesgo sistémicos y locales, y la presencia de signos clínicos adicionales.
La clasificación de la enfermedad periodontal se realiza siguiendo los criterios establecidos por la Academia Americana de Periodoncia, que considera tanto la extensión como la severidad de la pérdida de inserción clínica. Esta clasificación permite establecer un diagnóstico preciso y determinar el estadio y grado de la enfermedad periodontal presente.
La determinación del pronóstico individual por diente constituye un aspecto fundamental de la interpretación, clasificando cada diente como de pronóstico bueno, dudoso, malo o imposible. Esta evaluación considera factores como la pérdida de inserción, la movilidad dental, el compromiso de furcas y la respuesta esperada al tratamiento.
La planificación del tratamiento se basa directamente en los hallazgos específicos del periodontograma, permitiendo diseñar estrategias terapéuticas personalizadas que aborden las necesidades particulares de cada caso. Esta planificación puede incluir desde medidas preventivas hasta intervenciones quirúrgicas complejas.
El establecimiento de un protocolo de mantenimiento personalizado representa el objetivo final de la interpretación, determinando la frecuencia de controles necesarios y las medidas de higiene oral específicas requeridas para mantener la estabilidad de los resultados obtenidos.
Ventajas del Periodontograma Digital
El periodontograma digital ofrece múltiples ventajas respecto a los métodos tradicionales de registro manual. La precisión y reproducibilidad de los datos clínicos se ve significativamente mejorada, eliminando errores de transcripción y garantizando la consistencia de las mediciones a lo largo del tiempo.
La comunicación visual con el paciente se facilita enormemente mediante gráficos intuitivos y representaciones visuales del estado periodontal. Esta capacidad de visualización mejora la comprensión del paciente sobre su condición y aumenta la motivación para seguir las recomendaciones terapéuticas y de higiene oral.
El seguimiento longitudinal de la evolución periodontal se optimiza mediante la comparación automática de datos entre diferentes visitas. El sistema puede generar gráficos de tendencias que muestran claramente la progresión o estabilización de la enfermedad, facilitando la toma de decisiones clínicas.
La integración con la historia clínica digital y los sistemas de gestión de clínicas representa una ventaja operativa significativa. Esta conectividad permite el acceso inmediato a la información desde cualquier estación de trabajo y facilita la comunicación entre diferentes especialistas involucrados en el caso.
La mejora en la eficiencia de planificación y documentación de tratamientos se traduce en un ahorro considerable de tiempo clínico. Los informes automatizados y las plantillas de tratamiento pre-configuradas agilizan los procesos administrativos y mejoran la calidad de la documentación clínica.
¿Cómo hacer el llenado de un periodontograma?
El llenado de todo odontograma se hace, como se sabe, a partir de la observación del periodonto. Esa observación se realiza mediante el siguiente protocolo:
Se realiza una evaluación inicial de los tejidos bucales. En esta primera fase se buscan rastros de sangrado e inflamaciones.
- Se aplica un sondaje en la zona periodontal. Para esto se utiliza la sonda, que es una pequeña herramienta puntiaguda con la que el especialista raspa y escudriña la zona.
- Se aplican radiografías para detectar pérdida o ausencia de huesos.
Se hace el diagnóstico final.
Según se desarrolle esta observación se denotan y describen en el periodontograma todas las diferentes patologías y tratamientos anteriores localizados, así como las ausencias de piezas dentales, y se reflejarán mediante el uso de colores en la cara del diente a tratar. Cada patología o ausencia de pieza se representará siguiendo las siguientes directrices:
Se utiliza una X de color azul en el lugar correspondiente en caso de ausencia de alguna pieza dental, y si es necesaria una extracción se realiza una X de color rojo.
- Las caries se indican con un punteado de color rojo en la zona donde se encuentra la misma.
- Si se trata de una pieza con un empaste anterior, este se identifica con un sombreado; y en caso de que este empaste requiera de un nuevo tratamiento deberá resaltarse la zona con una circunferencia de color rojo.
- Si es necesaria una endodoncia, esta se señala con una X de color rojo en la raíz del diente que la necesite, y si existe una endodoncia hecha se señala en la raíz con una X azul.
- Cuando existe una corona en alguna de las piezas, se realiza un círculo azul alrededor de ella.
- En caso de que se necesite colocar un puente fijo, se rodea con un círculo rojo y en póntico se rodea en azul, y todo se incluye dentro de corchetes.
- Las piezas que comienzan a erupcionar se señalan con una flecha azul hacia arriba si están en la arcada de abajo, y con una flecha azul hacia abajo si está en la arcada de arriba.
Se utiliza una letra T para señalar las piezas que han sufrido de algún tipo de traumatismo.
Además, se deberá tomar en cuenta el tipo de nomenclatura dental que ha de utilizarse, porque existen diferentes tipos. Estos sirven además de lenguaje universal como referentes de cada una de las piezas dentales, facilitando su ubicación y registro.
Periodontogramas para clínicas odontológicas
El periodontograma resulta una herramienta imprescindible para un desempeño médico odontológico de primer orden. Al momento de utilizarlo este debe ser versátil, es decir, conviene siempre trabajar con un tipo de odontograma de adulto que sirva igualmente para ser aplicado en pacientes de menor edad.
Como protocolo determinante en la elaboración de la historia clínica dental de tus pacientes, el periodontograma suele realizarse sin ningún tipo de alteraciones, es decir, no se debe pasar por alto ninguna novedad ni ser alterado, solo al ir actualizándose a medida de que el tratamiento del paciente avance con el tiempo.
En suma, el periodontograma es el punto de partida para todo tratamiento dental. Sin este mapeo específico y especializado del periodonto, cualquier paso posterior en otro servicio de odontología podría resultar bastante difícil y posiblemente inadecuado. Debes saber que si quieres que tu clínica dental cuente con la mejor herramienta en el seguimiento y tratamiento de pacientes, tendrás que hacer de tus periodontogramas una herramienta actualizada y eficaz, pues no habrá buen tratamiento sin un diagnóstico preciso.
Preguntas frecuentas sobre el periodontograma
¿Duele hacerse un periodontograma?
El procedimiento es generalmente indoloro. La sonda periodontal solo mide la profundidad de las encías y puede generar una ligera molestia o sensibilidad, especialmente si hay inflamación. No requiere anestesia, salvo en casos de alta sensibilidad o pacientes muy nerviosos.
¿Con qué frecuencia se debe realizar un periodontograma?
La frecuencia depende del estado de salud periodontal del paciente. En personas con encías sanas, puede realizarse cada 6 a 12 meses como parte de la revisión rutinaria. En pacientes con enfermedad periodontal activa, el odontólogo puede recomendar evaluaciones más frecuentes, incluso cada 3 meses, para controlar la evolución y la efectividad del tratamiento.
¿El periodontograma se puede hacer digital?
Sí, muchos consultorios utilizan software especializado que permite generar periodontogramas digitales. Esto facilita el almacenamiento de la información, el seguimiento longitudinal de cada paciente y la planificación de tratamientos personalizados. Además, los periodontogramas digitales permiten comparaciones entre citas para evaluar el progreso o la progresión de la enfermedad periodontal.
¿Quién puede interpretar un periodontograma?
La interpretación del periodontograma debe ser realizada por un odontólogo o periodoncista, ya que requiere conocimientos sobre anatomía dental, patología periodontal y planificación de tratamientos. Un correcto análisis permite diseñar estrategias de higiene, procedimientos quirúrgicos o tratamientos regenerativos según la necesidad del paciente.